Lo que tuvimos. Lo que siempre tendremos.
Lo que alcanzamos.
Lo que luché.
Lo que conocí.
Lo que no conocí.
Todo. Siempre.
Mucho especial. Bastante en falta.
Se irá la voz y la figura menuda.
Ya no habrá inmediatez ni tardanza nunca.
Ya no podré esperar. No habrá nada más que anhelar.
O sí. En otro lugar. Con otros ojos. Y con más alma. Ojalá. Con más alma.
Entre tanto, aquí, tendré que seguir subiendo las persianas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario